"¡Mis hijos, mis hijos!" gritaba Natalie Unitt, la madre de los niños fallecidos, mientras el infierno se cernía sobre su hogar y le arrebataba la vida de sus hijos.

Se describe a sí misma como una "madre orgullosa" en las redes sociales. El día de la tragedia, le ingresaron en el hospital por haber inhalado humo, mientras a su marido le trataban varias quemaduras en el cuerpo.

La tragedia acabó con la vida de los cuatro hijos de Natalie Unitt y Chris Moulton, que ahora se enfrentan a cargos de homicidio involuntario por negligencia.

Ellos corrieron la suerte de conseguir escapar por una ventana de la vivienda junto al quinto de sus hijos, de 2 años de edad.

Los familiares han arremetido contra la Policía por el arresto de los padres, afirman que "están sufriendo por la pérdida de sus hijos".

"Nada más salir del Hospital los han metido en una celda, no entendemos por qué", dijo uno de ellos al diario británico The Sun.

Los vecinos también defienden la inocencia de Unitt y Moulton. Señalan que el arresto de ambos es un duro golpe para el vecindario y que se trata de una tragedia horrible.

Consternados, relatan cómo escucharon los gritos de los pequeños cuando las llamas empezaron a brotar por las ventanas.

"Fui al lavabo y escuché el chillido de los niños, le dije a mi marido que llamara al 999", relata una vecina a The Sun.

Un portavoz de la Policía de Stafford comunicó el arresto de un hombre de 24 años y de una mujer de 28 años, acusados de homicidio involuntario por una negligencia grave.

"Pedimos a los ciudadanos que no especulen sobre lo ocurrido y tengan paciencia mientras continúa la investigación", señaló.