La tarde de este lunes 13 de enero, los padres de Julen, José Roselló y Vicky García, han estado arropados por sus vecinos del barrio de El Palo de Málaga en un emotivo acto en memoria del pequeño Julen en el día que se cumple un año de su muerte al caer por un pozo de más de 100 metros de profundidad en una finca de Totalán.

Ha sido José el que ha explicado el duro momento por el que atraviesan ante la prensa y es que a su madre "le cuesta más expresarse" y "lo lleva mucho por dentro". "En el día de hoy es el mismo dolor que ayer y el mismo que el de mañana", ha señalado José Roselló con la voz entrecortada agradeciendo el cariño recibido por sus vecinos y amigos del barrio.

"Tengo los mejores vecinos del mundo. Lo intentamos llevar con la máxima tranquilidad posible. Yo soy un enamorado de mi barrio y de la gente de mi barrio, no puedo decir otra cosa de ellos que cosas buenas", ha apuntado.

José también se ha acordado de su otro hijo fallecido, Oliver, también muy querido por los vecinos de El Palo: "Hay muchas personas de las que hay ahí que a Julen, incluso a Oliver, los han tenido en su casa, han estado con ellos, con sus niños y se han criado juntos, como hemos hecho aquí siempre en el barrio, como si fuéramos hermanos".

Al acto han acudido numerosos vecinos y han colocado velas en forma de corazón rodeando una fotografía de Julen y Oliver. Además, se ha leído un sentido discurso que ha arrancado las lágrimas a varios de los allí reunidos. Este ha sido el discurso íntegro:

No sabría por dónde empezar, hoy nos reunimos aquí por ti, Julen, aunque el dolor sea irreparable, queremos darle todo el amor a tus papis y aunque sea un día feo, mandaros todo nuestro cariño y hacerte saber lo mucho que te quiere tantísima gente.

Parece mentira que haya pasado un año que no estés con nosotros, aun parece un mal sueño, parece ser que el cielo está falto de ángeles y por ello tuviste que ir a ese lugar al que un día nos reencontraremos y el dolor cesará y esta pena inmensa que nos invade.

Desde el día que partiste nada es igual pero sigues aquí, en cada momento, en cada lugar. Encuentro la calma en esa sonrisa de mamá, al mirar tus fotos y ahí estás tú, reflejado en su cara.

Aún recuerdo, y jamás olvidaré, cuando venías a mi casa buscando la moto de Alberto, que tanto te gustaba, para mí esa moto ya es sagrada. Es tuya mi amor. De ti, Oliver, tu manía de no querer darme un besito, solo hacerlo cuando menos lo esperaba. Amaba ese momento. Cuanto te extrañamos, cuanta falta hacéis.

Os amamos con el alma. Sois la luz de papá y mamá, seguid guiándolos y alumbradles el camino. Que puedan demostrar que son indestructibles y que sigan utilizando esa fortaleza que los define. Aquí estaremos nosotros dándoles nuestro apoyo, amor y respeto, por y para siempre.

Oliver, ruge fuerte cuando papi lo necesite, Julen, utiliza el poder del anzuelo cuando mami lo necesite. Sé que ese es el secreto de la fuerza de vuestros papis. Lo esencial y más importante es que desde el cielo sintáis que os amamos mucho. Nunca jamás partiréis de nuestro corazón.

Al finalizar ese comunicado, los allí concentrados han soltado decenas de globos que se han elevado hasta el cielo en memoria de Julen y su hermano Oliver, todo delante de un improvisado altar con un emotivo mensaje: "Guerreros que dejan huella, por siempre con nosotros".