"Los líquenes son bioindicadores. Si hay muchos es porque la calidad del aire es muy buena y si hay pocos significa que hay contaminación y, por tanto, la calidad del aire es peor", explica Alejandro Sánchez, biólogo.

Con una aplicación llamada Natusfera se pueden realizar observaciones de los líquenes mediante la cámara del móvil. Los líquenes son organismos pluricelulares y son muy resistentes a las condiciones ambientales adversas. Crecen en sitios húmedos y se extienden sobre las rocas o las cortezas de los árboles.

"Queremos generar mapas de la calidad del aire de las ciudades. Cuando los indices de polución aumentan, va a disminuir tanto la abundancia de los líquenes como su diversidad", señala el biólogo Sergio Pérez.