Lo tenían planificado, es lo que lo dice el juez en su auto. Una conversación de WhatsApp entre los cinco acusados de presunta violación revela la intención de practicar sexo en grupo en las fiestas de San Fermín.
"Se refieren a su preferencia por follarse a una buena gorda entre los cinco y la voluntad de llevar para el viaje burundanga", recoge el auto.
A pesar de que los testimonios de los cinco procesados coinciden, el magistrado cree que se pusieron de acuerdo para dar la misma versión. Una versión, que no coincide con las grabaciones que prueban que los acusados obligaron a la joven a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad.
"No se aprecia consentimiento alguno por parte de la víctima sino mero sometimiento a una apabullante situación de superioridad física y numérica". E insiste en que "no se detecta colaboración ni tampoco el alegado trato cariñoso sino más bien manejo forzado de su cuerpo agarrándola incluso del pelo".
Además, dice el juez en su auto, testigos que atendieron a la joven la noche de la supuesta agresión corroboran el estado de nerviosismo de la víctima y justifica que ella no pidiera ayuda.
11 de folios de auto en los que el juez recuerda que los acusados se enfrentan a una pena de hasta 80 años de prisión.
