Los miembros de 'La Manada' han llegado en un furgón policial tintado al Centro Penitenciario de Sevilla I, en Mairena del Alcor. Allí han sido trasladados después de darse a conocer el fallo del Tribunal Supremo, que ha elevado la condena a los cinco a 15 años de prisión por un delito de agresión sexual cometido contra una joven las fiestas de San Fermín de 2016.

Después de recibir el fallo, cuatro de los miembros de 'La Manada', José Ángel Prenda, Jesús Escudero, Antonio Manuel Guerrero y Alfonso Jesús Cabezuelo, han sido detenidos por los agentes y han sido trasladados a la Jefatura de Policía Nacional de Sevilla. Por su parte, Ángel Boza ha acudido voluntariamente a las dependencias policiales, como se puede ver en el vídeo expuesto a continuación.

"A partir de ahora pueden llamarles delincuentes, sí, pero para mí son cinco inocentes en prisión", ha asegurado Agustín Martínez, abogado de 'La Manada'. Ha denunciado que "se haya detenido a las personas antes de comunicar la sentencia" y ha considerado que, si bien "es lo que toda la sociedad quería", "que se haya hecho justicia es otra cosa".

Estos mismos argumentos ha esgrimido durante una entrevista que ha concedido al programa Más Vale Tarde: "Siempre he entendido que eran inocentes y cada vez más entendía que la única sentencia que podía dictarse era absolutoria".

Además de la condena a 15 años de prisión, el fallo del Supremo también obliga a los acusados a la "inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena", así como a la prohibición de acercarse a la víctima "durante 20 años", ya sea su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro lugar que sea frecuentado por ella, y "a una distancia inferior a los 500 metros".

Además, se prohíbe a los condenados comunicarse con la joven "por cualquier medio de comunicación o medio informático o telemático, contacto escrito, verbal o visual, y a 8 años de libertad vigilada; debiendo indemnizar conjunta y solidariamente a la víctima por este delito en 100.000 euros".