Se trata del segundo día de protestas frente a la casa donde los vecinos dicen que viven los culpables del asesinato del hombre que murió el pasado domingo a causa de una puñalada en el cuello.

Los manifestantes han quemado varios enseres frente al domicilio y los antidisturbios han interrumpido en las protestas. Los vecinos han arrojado varios objetos y huevos a los guardias.

En la protesta que tuvo lugar el martes 19 de marzo, los vecinos quemaron un camión como represalia por el crimen. Además, han aparecido pintadas en las que se puede leer "asesinos" en la casa de los supuestos culpables.

La familia del supuesto agresor se ha desvinculado de su relación con los hechos. Entre ello, los vecinos del barrio madrileño han asegurado que se concentrarán diariamente hasta que haya consecuencias legales contra ellos.