Tras una batida especial en la que se han peinado 27 kilómetros lineales y 15 puntos calientes, se han encontrado indicios y pruebas que están bajo custodia de la Guardia Civil y deben ser analizados para saber si están relacionados con el caso.

Dicha batida ha sido muy complicada y multitudinaria desde que Manuela Chavero desapareciera. Un total de 350 efectivos, de los que muchos eran voluntarios y vecinos de Monesterio, en Badajoz.

Todos ellos se han esmerado en el análisis de cada detalle y han hecho hincapié en las inmediaciones de la vivienda de la desaparecida.

La organización se ha mostrado satisfecha con los resultados de la búsqueda porque, con esta batida, además de encontrar, también pretendían descartar.