El partido animalista PACMA ha denunciado las impactantes imágenes, en las que se puede ver al toro siendo abatido de un disparo en la Plaza de España de San Juan de Coria, Cáceres.

"Después de horas de hostigamiento por las calles del pueblo, acabaron con su vida de un tiro, en la vía pública y en presencia de los vecinos", ha apuntado la formación.

Y es que el Reglamento de Festejos Taurinos Populares de Extremadura prohíbe dicha ejecución: "Se les dará muerte inmediatamente sin presencia de público en los establecimientos o instalaciones habilitados para ello".

Además, la formación ha asegurado que la Guardia Civil no les permitió grabar la muerte del toro, algo que vulnera la libertad de información.