Los policías o guardias civiles no suelen recibir formación específica para buscar a las personas desaparecidas. Por eso, los familiares reclaman desde hace años una unidad especial que aún no existe aunque en España se pierde la pista de media a 96 personas al día.

"Es mucho más sencillo investigar un homicidio porque tienes el cadáver,tienes algo ya, pero mucho más fácil que el homicidio es el secuestro, que tienen que llamar para pedir dinero, en la desaparición no tenemos nada, se busca con una hipótesis y luego tienen que ser especialistas", comenta Ángel Galán, miembro del Instituto de Probática e Investigación Criminal

Este tipo de especialistas de los que habla Galán ya existen desde hace 20 años en Bélgica a raíz del caso Dutroux, en el que un pederasta asesinó a cuatro chicas.

"Cuando no existe esta unidad especializada, estos policías, que suelen ser buenos policías, muy experimentados, suelen ser reclamados para otras funciones, otras investigaciones y esto diluye la investigación que se necesita", añade Paco Lobatón de la Fundación Europea Personas Desaparecidas QSD Global.

Las unidades especiales requerirían una formación específica y especializada. "Estarían integradas por agentes de policía, altamente cualificados seguramente para esa función pero también para dar pasos en las derivaciones criminales que pudiera haber" asegura Lobatón.

Agentes que estén preparados para responder de forma coordinada e inmediata y resolver casos como el del niño pintor de Málaga que aunque tiene casi tres décadas sigue estando considerado por la Interpol como la desaparición más descorcentante de los últimos tiempos.