Es el oro del norte de Cáceres: la hoja de tabaco. Aquí se recoge el 95% de la producción española. Pero unos pocos agricultores podrían llevarlo a la ruina por hacer contrabando con su propia mercancía. El kilo de este producto ronda los 2,25 euros, en el mercado negro se pude pagar hasta los 10 euros.

Hace solo unos meses la Guardia Civil se incautaba de 250 toneladas de este producto destinadas al mercado negro. Seis personas fueron detenidas.

"Intentaban a través de una empresa legal camuflar lo que es la receptación y, posteriormente, la venta fuera de los cauces legales que se deben de llevar", explica Manuel Rubio, Guardia Civil de Badajoz.

El tabaco en Cáceres da empleo a unas 20.000 familias. Las cooperativas están preocupadas por el daño que causa el contrabando al sector, aunque dicen: no es una práctica extendida.

"La realidad es que son cuatro irresponsables los que están poniendo en peligro un negocio y una forma de vida muy importante para Extremadura", afirma Juan José Manzanero, gerente de 'Ibertabaco'.

"Indiscutiblemente todo lo que vaya de contrabando no nos lo compran nuestros clientes, que realmente son los que garantizan una buena calidad tanto sanitaria como organoléctica", indica Rubén Martín, gerente de 'Cotabaco'.

Desde hace ocho años, las etiquetas de cooperativas como esta reflejan todo el recorrido del tabaco. Todo el proceso que tiene esta caja está trazado. Sabemos perfectamente las unidades de fertilizantes que tiene, los fitosanitarios que se han autorizado...", añade Martín.

Y también su origen, quién lo ha cultivado o en qué parcela. La Junta de Extremadura trabaja ya en un decreto para que sea obligatorio.

"La Junta de Extremadura está elaborando un decreto para la trazabilidad del tabaco y creemos que esto puede ser una herramienta muy importante para poder tener controlado el producto desde el origen hasta el destino final", declara Anselmo Suárez, productor de tabaco.

Una medida que podría ayudar a frenar el contrabando.