Un coche se da a la fuga después de que su conductor diera una identidad falsa en un control policial en Texas, Estados Unidos. En las imágenes de la Policía se puede ver cómo los agentes lo persiguen por carretera y por aire para darle caza.

El sospechoso conduce de manera temeraria, a gran velocidad y con el parachoques colgando hasta que en plena autopista pincha la rueda izquierda del coche y pierde el neumático, pero continúa. Por aire los agentes indican los movimientos a sus compañeros en tierra y dos patrullas consiguen acorralarle.

Es entonces cuando el conductor reduce la velocidad y abre la puerta mientras desde el aire los agentes advierten que "está buscando en el suelo del coche". En ese momento acaba parando el coche y agazapado desde su puerta dispara contra un agente que cae al suelo.

Otro agente aprovecha el momento y dispara al sospechoso para neutralizarlo para justo después prestar ayuda a su compañero, practicándole un torniquete para que dejara de perder sangre.

Finalmente llega la ayuda sanitaria en helicóptero y el agente se acaba recuperando en el hospital. No corrió la misma suerte el fugitivo abatido, que pese a que también fue trasladado al hospital, acabó muriendo.