Fotografían
tranquilamente a las olas cuando el agua se mete en los coches en Castro
Urdiales, invadiéndolo todo y obligando a subirse a cualquier escalón. Pero cuando el mar se cabrea, ni si quiera
en lo alto se está a salvo y buscar la mejor imagen con olas de diez metros en el
Cantábrico es una cosa muy peligrosa.
La Policía y la Guardia
Civil advierten de ello con tuits: "Tu vida vale más que el mejor selfie, ¿no
crees?". Muchos también se saben
la teoría, pero aun así acaban empapados. Este miércoles en Avilés un hombre
resultó herido mientras sacaba fotos al mar y diez personas fueron multadas en San
Sebastián al saltarse el cordón de seguridad.
Nos confiamos y nos damos cuenta cuando tenemos la ola encima haciendo que nuestro mejor plano se vaya a negro.