Igor 'el Ruso' ingresó escoltado y con fuertes medidas de seguridad en la cárcel de Teruel antes de que lleguen desde Italia las pruebas de ADN para ultimar su identificación. Además se investiga si podría haber cometido más crímenes en España, como el del pantano de Susqueda en el que murieron dos jóvenes.

La Guardia Civil quiere cotejar los restos de ADN y las huellas que los Mossos recogieron en el lugar del crimen, un pantano inhóspito en Girona al que Marc y Paula acudieron para pasar el fin de semana.

Sus cadáveres aparecieron un mes después flotando en el agua, a pesar de que el asesino los había lastrado con mochilas. Antes, según la autopsia, los mató a tiros.

Precisamente a través de la munición también se podría aclarar si Igor 'el Ruso' estuvo en Susqueda. En el momento de su detención llevaba tres armas cortas, dos ellas pertenecían a los guardias civiles que asesinó.

Ernesto Pérez Vega, un policía retirado, explicaba en Expediente Marlasca que "estamos hablando de un hombre con un perfil claramente criminal, sin ninguna empatía con cualquiera que se le pusiera por delante para evitarle lograr su fin".

El asesino aseguró ante la juez que vino a España en septiembre, días antes de que se produjera el crimen de Susqueda, y lo hizo huyendo de Italia, donde le acusan de haber cometido tres asesinatos.