La Guardia Civil ha desarticulado un grupo criminal organizado dedicado a la caza furtiva en fincas de la comarca cacereña de Campo Arañuelo, cuyas acciones, dirigidas a obtener exclusivamente la cabeza de los animales, han causado un perjuicio patrimonial de unos 200.000 euros.

En concreto, los agentes han detenido a cinco personas y han investigado a otras tres por "su relación directa" en 25 delitos contra la flora y la fauna y dos de receptación por taxidermia ilegal, así como de maltrato animal y encubrimiento.

La operación policial, denominada "Aspicientis", ha permitido localizar más de 170 trofeos de caza, entre ciervos, muflones, gamos, corzos, jabalíes y cabras montesas en talleres clandestinos de taxidermia, domicilios, naves y explotaciones agrarias.

Estas instalaciones, relacionadas con los ahora detenidos, estaban ubicadas en las localidades cacereñas de Talayuela y Navalmoral de la Mata, han informado fuentes del instituto armado a través de un comunicado de prensa.

Las investigaciones se iniciaron a raíz de varias denuncias interpuestas por propietarios de distintas fincas rústicas de la zona por delitos de caza ilegal, principalmente de jabalíes, ciervos, muflones y gamos.