La operación se inició a raíz de la operación Dajú desarrollada en julio de 2016, donde la Guardia Civil procedió a la detención de cuatro personas pertenecientes a una banda de ciudadanos británicos y españoles que abastecían de droga a zonas de ocio en Magaluf y en la que se incautaron 4,8 kilos de cocaína.

Así, esta organización se dedicaba a "introducir cocaína en barcos de recreo y controlaban la distribución de la droga en la parte de Punta Ballena", han explicado fuentes de la Guardia Civil. Como consecuencia de esta intervención, los agentes tuvieron conocimiento de que, a pesar de haber cortado el suministro de droga a los 'camellos' de la calle Punta Ballena, estos seguían "muy activos" en cuanto a la venta de droga a turistas que acudían a los locales nocturnos.

"Este año volvimos a retomar la investigación y nos centramos en la parte que nos faltaba, que eran los suministradores, los que están en la calle a diario", han matizado. De este modo, la Benemérita pudo comprobar la existencia de un grupo de personas, formado principalmente por ciudadanos británicos, dedicado a la distribución de drogas. Tras su identificación, se procedió a la detención.

"Decidimos el día 31 de agosto proceder a la detención así como al registro de todos los integrantes de la organización. De los 14 detenidos, 13 estaban en Palma y uno en Barcelona, que era el enlace con los Países Bajos para introducir la droga en Palma, donde estaban los suministradores medios y los 'tiqueteros' que eran los que repartían la sustancia al consumidor", han explicado.