La familia de Pilar Garrido, la joven desaparecida en México niega la información publicada que apuntarían directamente a su cuñado como sospechoso de la desaparición.
"Yo confío plenamente en mi cuñado. Mientras no se me demuestre lo contrario voy a defenderlo hasta en el mismo infierno. Le conocemos desde hace 11 años y sabemos que quiere a mi hermana", ha destacado Raquel Garrido, hermana de la desaparecida.
La policía ya analizó el coche y no se han vuelto a producir, aseguran, nuevos registro en las últimas horas, por lo que desmienten que que hayan encontrado sangre en el maletero del marido de Pilar. "La Policía Nacional no está al tanto de esta información", ha explicado Raquel.
La hermana de Pilar pide además coherencia: "Si hubiese sangre de mi hermana en el coche él estaría arrestado. Está cuidando ahora mismo de un menor de 12 meses". Asegura que su cuñado denunció la desaparición en el mismo momento en el que se produjo el secuestro, no días después, y fue sometido un intenso interrogatorio de más de diez horas.
"Mi cuñado me dice: 'Si hubiesen tenido una mínima posibilidad yo ya estaría encerrado. Al primero al que han investigado es a mí'", ha añadido Raquel. Aun así aseguran que están esperanzados porque les consta que se están produciendo avances en la investigación, pero no precisamente dirigidas hacia su cuñado.
