Los mossos estaban sobre la pista de Jordi Magentí y de su hijo desde que aparecieron los cadáveres de Marc y Paula, por eso pincharon sus teléfonos y esto fue lo que escucharon:

- El hijo: "Yo creo que tienes razón tú (...) sospechan algo de nosotros ¿vale? Porque ahora he encontrado un artículo que han colgado en el Diario Avui ¿vale?"

- Jordi Magentí: "Sí"

- El hijo: "Y salía que la policía ahora quiere ir con un georadar para encontrar algún arma del crimen o una bala o alguna prueba ¿vale?"

- Jordi Magentí: "Pueden hacer lo que quieran, yo no sé nada"

- El hijo: "Hay un vehículo que el día del crimen hizo unos viajes sospechosos y que algunos testigos relatan a este diario. Los Mossos están tras su pista"

Hablan del todoterreno blanco que conducía Jordí Magentí. El acusado relató a su compañero de celda que esos recorridos sospechosos los hizo para traer agua. Quería regar la plantación de marihuana que regentaba su hijo. Según él, el verdadero asesino de los chavales:

"Llegué y me encontré que había matado a la pareja. Él me explicó que había disparado a Paula en la cabeza y a Marc por la espalda. Decidimos tirarlos al agua en la zona más profunda, un sitio que yo conocía. Les pusimos piedras para que no salieran a la superficie. Del coche nos deshicimos tirándolo al pantano"

Le contó que decidió asumir la culpa. Se lo debía a su hijo porque él había asesinado a su madre.