El incendio declarado en dos edificios del barrio de Campanar, que ha dejado cuatro personas fallecidas y 14 desaparecidas, ha agitado a todo el país, pero lo cierto es que aunque muchos vecinos han perdido todas sus pertenencias, muchos residentes del edificio de catorce pisos pudieron huir del fuego y salvarse la vida. Uno de los responsables de que haya tantos supervivientes es Julián, el conserje de uno de los edificios.

El milagro es que gran parte de los vecinos consiguieron salir a tiempo de sus casas huyendo de las llamas y la mayoría fueron alertados por Julián. Al darse cuenta de que estaba empezando a arder, el trabajador fue puerta por puerta sacando a todos los vecinos que pudo, según los vecinos que lograron escapar del fuego. Algunos de los residentes lo llaman su "héroe", y se ha convertido en uno de los protagonistas.

Julián se jugó la vida para alertar a sus vecinos y lograr que salieran de sus residencias lo más rápido posible, logrando así salvar numerosas vidas. El conserje ha dado declaraciones a la Cope señalando que su labor heroica la hizo de corazón, señalando, "lo que quería era ayudarles". Este viernes ha vuelto a las inmediaciones del lugar de los hechos y ha señalado que ha vuelto porque los vecinos le llamaron y dice "he venido para estar con ellos y apoyarles"