El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha puesto la investigación sobre la muerte del cámara José Couso en Irak en conocimiento de Genocide Network, una red de cooperación europea sobre genocidio y crímenes de guerra y contra la humanidad, para que los militares comparezcan ante la justicia.

En un auto, el magistrado adopta esta decisión ante la imposibilidad de hacerles comparecer ante la justicia española, "ni aun siquiera solicitando la oportuna asistencia judicial a las autoridades norteamericanas, dada la negativa de las mismas".

Pedraz recuerda que los tres militares procesados están acusados de una grave violación del derecho internacional humanitario, al tratarse de un ataque indiscriminado a la población civil, en concreto periodistas, en concurso con homicidio.

Añade que son delitos que de acuerdo a la Convención de Ginebra se podrían perseguir pero durante estos años "ni siquiera se han podido insertar las órdenes internacionales de busca y captura en Interpol porque ésta se ha negado al considerar, a instancia de Estados Unidos, el delito como un asunto militar".

Ahora, a la luz del Estatuto de Roma que contempla la cooperación internacional para luchar contra la impunidad, Pedraz remite la causa a Genocide Network, en el seno de Eurojust, por ser una organización fundada por el Consejo de Europa para fomentar la cooperación entre las autoridades nacionales en la investigación de este tipo de delitos.