Francesco Arcuri está dispuesto a negociar una serie de condiciones para que Juana Rivas entregue por fin a sus hijos. "Yo estaría encantado de tener una custodia compartida", ha señalado.

No sólo custodia compartida, también ofrece alojamiento para ella en Italia y manutención. Sin embargo, para el entorno de Juana esto no es nada nuevo. "Juana ha trasladado muchas propuestas de negociación desde que vino a España", explica la asesora jurídica Francisca Granados.

Francesco niega todo de que lo ha sido acusado: "Me llaman maltratador, sexista, que obligaba a la madre a trabajar en casa, que la encerraba. Es todo falso".

Y recalca emocionado que su hijo nunca ha tenido miedo de él: "Mi hijo lloraba diciendo: '¿dónde está papi?', y ella no me abría la puerta".

El Tribunal Constitucional rechazó el recurso de amparo solicitado por Juana. Tiene que agotar antes las opciones por tribuales ordinarios. Pero su defensa anuncia que intentarán presentar otro recurso similar lo antes posible.