A pesar de que varios ciudadanos intentaron ayudar a Kaylee Muthart, una joven de 20 años, cuando se encontraba en la calle gritando que el mundo estaba "al revés", Kaylee los rechazó.
La joven tenía alucinaciones después de haber consumido metanfetamina y, según ha publicado The New York Post, creía que debía "sacrificar los ojos" para poder ir al cielo. Por esta razón, Kaylee se arrancó los ojos.
Fue la madre de la joven quien, al encontrársela en la calle, llamó a los servicios de Emergencia. Sin embargo, a pesar de que llegaron rápidamente al lugar de los hechos, no pudieron hacer nada para que la joven no perdiera la vista.
Kaylee Muthart se encuentra ingresada en el hospital en observación acompañada de su familia, que quiere emprender una lucha para que no vuelva a haber más casos así. Por esta razón, la madre de la joven ha hecho público lo ocurrido.