La modelo Joana Sanz ha puesto punto y final a su relación con Dani Alves, en prisión tras ser denunciado por una presunta agresión sexual en una discoteca de Barcelona en diciembre de 2022. A través de una publicación en su cuenta de Instagram, en la que se ven dos imágenes con dos páginas de un diario, Sanz habla de los "meses horribles" que ha pasado, los "peores" de su vida.

"La sensación de abandono y soledad vuelve a tocar mi puerta. Miles de 'por qué' sin respuesta. Elegí como compañero de vida a una persona que ante mis ojos era perfecta. Siempre estuvo cuando más lo necesitaba, me apoyó en todo, me impulsó a crecer, siempre cariñoso, atento... Me cuesta tanto aceptar que esa persona pudiera romperme a mí en mil pedazos", lamenta la modelo.

En su nota, confiesa que le costará "años" el sacar ciertas cosas de su memoria: "Su forma de mirarme, esa forma de como si yo fuera la más increíble del mundo y, joder, sí, soy increíble. Soy increíble porque soy trabajadora, independiente, inteligente, detallista, cariñosa, divertida, fiel y humana. Tan humana que, a pesar del daño que me ha causado, sigo estando aquí a su lado".

Sin embargo, estará a su lado "de otra forma". Sanz se queda así con "lo mágico" de su relación con Alves y "cierra" una etapa para dar paso a "la siguiente".