El jardinero alemán Bernhard Graumann, de 59 años, se suicidó en Mehlingen después de que presuntamente matase a un médico vecino suyo con un explosivo oculto en la entrada de su consulta. Al parecer, ambos eran amigos pero se habían peleado recientemente.

Según ha recogido el medio alemán 'RTL', también estaría detrás de una segunda explosión que hirió a dos mujeres del mismo barrio que conocían al doctor y que habían tenido algún altercado con Graumann.

Las autoridades que llevan el caso están localizando a todos los vecinos que mantenían una mala relación con el jardinero para investigar si existen también bombas en sus casas o inmediaciones.

Las primeras informaciones apuntan que antes de suicidarse, el jardinero preparó todo para herir y matar a quienes odiaba.

"Las personas que han tenido una relación privada o comercial problemática con Graumann deben ponerse en contacto con la policía de inmediato", han alertado las autoridades, que han habilitado un número de teléfono para los aludidos.