Se abre paso como si fuera una gracia, un chiste, un meme. Como si detrás de imágenes no hubiera nada más. Solo humor. Pero no es así, esta especie de humor armado, conocido como la 'jajaganda', es utilizado para trasladar un mensaje y humillar o desprestigiar a alguien. Ya sea una persona, institución o cargo, explica desde el Equipo de Verificación de Newtral Guillermo Infantes.

De hecho, es una técnica de desinformación a la que ha recurrido Moscú. Este tipo de propaganda ya no es lo que era. "La propaganda tradicional, lo que podría ser una viñeta en clave de humor, ahora la traslación es diferente. Ahora un meme, un gag muy viralizable en internet se comparte en tik tok y Facebook", expresa el experto.

Esta técnica la vimos ya antes de que empezara la guerra, cuando EEUU anunció una posible invasión a Ucrania el 16 de febrero. Ese día la embajada rusa en Sudáfrica compartía un meme con el siguiente texto: "16 de febrero de 2022. Mientras tanto en Ucrania".

La directora de comunicación del Lavrov pedía "a los medios de desinformación" ingleses que les informasen de sus futuras invasiones para, decía, planificar las vacaciones. Ocho días después Rusia invadió Ucrania.

En este sentido, Infantes insiste en la peligrosidad de la desinformación: "Es especialmente peligrosa porque ataca al plano cognitivo. Afecta a cómo pensamos, cómo nos relacionamos tanto socialmente como políticamente".

Ahora un informe de Seguridad Nacional alerta del uso de la 'jajaganda'. Porque sí. También la sufrimos en España. "Suplantaron al alcalde de Kyiv para tener una entrevista con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida", recuerda el experto.

Detrás, Vován y Lexus, dos cómicos rusos que consiguieron engañar a Martínez Almeida y a otros tantos políticos de todo el mundo. Estos ataques pensados sirven ridiculizar a los enemigos de Rusia en una guerra híbrida escondida también detrás de chistes que no tiene ninguna gracia.