La Guardia Civil investiga a una mujer de 26 años como presunta autora de un delito de maltrato animal por la muerte de un caballo de su propiedad en una finca de Xixona, Alicante, donde también fue hallado el cadáver de un perro suyo.

Según fuentes del instituto armado, el equino llevaba al menos cinco días muerto y podría haber fallecido de inanición, pues eran evidentes "la falta de higiene" y su "extrema delgadez".

Agentes del Seprona empezaron la investigación por el hedor procedente de una finca situada en la citada localidad alicantina.

Comprobaron que desde uno de los puntos del vallado se podía observar lo que parecía ser un caballo, que se encontraba inmóvil en el suelo, aparentemente muerto.

Tras tomar declaración a vecinos, consiguieron averiguar la identidad de la dueña y responsable del animal. Al entrar en la propiedad vieron que el caballo estaba muerto y tenía evidentes signos de falta de higiene y alimentación.

Durante la inspección de la finca, los agentes hallaron también el cuerpo sin vida de un perro, de raza doberman, que, al parecer, habría escapado de la finca y había sido atropellado en una carretera cercana.

El atropello, registrado un día antes, fue comunicado por la Policía Local a la dueña, quien trasladó el cadáver del can a la finca para enterrarlo, sin llegar a hacerlo.