El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil investiga a la dueña de la perra en Santander. El animal se encontraba atado a un árbol, sin agua y sin comida, y con heridas cuando fue entregado a un centro canino. El centro ha sido el encargado de alertar a Seprona.

Fuentes de la Guardia Civil han informado que se trata de una perra de raza 'American Staffordshire' de dos años, que presenta una delgadez extrema y una herida en el cuello totalmente infectada, con pérdida de tejido y por la que se puede observar las arterias principales, según el informe veterinario.

Estas heridas podrían indicar que la perra hubiese estado durante una larga temporada atada y con una lazada extremadamente apretada, ya que la lesión afecta a la práctica totalidad del cuello.

A la vista del informe del veterinario que atendió a la perra, los agentes abrieron diligencias por un presunto delito de maltrato y abandono de animal, y averiguaron la identidad de la persona que era titular del animal, que empezó a ser investigada el pasado jueves.

Actualmente la perra se encuentra en una protectora de animales de Cantabria, donde continúa su recuperación a la espera de un domicilio de acogida.