El Ministerio del Interior ha anunciado en un comunicado que se han desplazado los últimos inmigrantes que permanecían en ese centro penitenciario, que llegó a acoger a 572 personas de origen argelino y que en las próximas semanas comenzará a funcionar como cárcel.

Fuentes conocedoras del proceso han detallado que ya han sido trasladados los últimos 67 internos que permanecían en la prisión y que han sido reubicadas en otros centros de internamiento del territorio nacional.

Las fuentes no han precisado cuántos de los internos han sido repatriados a Argelia y cuántos enviados a otros CIE. Interior ha comunicado que a partir de este momento se procederá a reparar los daños que se han producido en la prisión durante el tiempo en el que ha funcionado como CIE temporal, un proceso que ha estado marcado por la polémica y las críticas del Defensor del Pueblo, diversas organizaciones sociales y la oposición política.

Máxime tras el suicidio de uno de los internos que apareció ahorcado en su celda el pasado 29 de diciembre, asunto sobre el que se ha pedido la comparecencia parlamentaria del ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido.

Interior ha explicado que la llegada masiva de inmigrantes a las cosas murcianas en el mes de noviembre supuso un fenómeno "excepcional" que no se producía en España desde hacía una década, una situación "de emergencia humanitaria" ante la que se tomó una medida "temporal y provisional".

Ha argumentado el Ministerio que siempre prefirió el uso de la cárcel como CIE antes que la ubicación en "campamentos temporales" que "no garantizaban unas mínimas condiciones de vida", como se ha hecho "en otros países". Y ha recordado que la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía avaló el uso de la prisión como CIE de forma temporal.