Se ha descubierto que este establecimiento almacenaba y distribuía, de manera ilegal, productos cárnicos sin tener una autorización sanitaria y, además, se ha comprobado que en diversas instalaciones tenían almacenados estos productos y otros lácteos para su distribución al consumidor.
En esa inspección se localizaron envases de paté caducados con un peso de 42 kilos; 42 piezas de paleta curada de tres kilos, y 11 envases de dos paletas de 6,2 kilos sin etiqueta ni lote; 360 kilogramos aproximados de quesos curados en mal estado; 42 paquetes de loncheados de jamón sin etiqueta ni lote; 22 quesos de distinta procedencia sin etiqueta; y cuatro cajas de 30 envases de jamón sin etiqueta ni lote.
También se encontraron otros productos cárnicos, como lomo, solomillo, secreto y pluma, que estaban congelados y envasados en cajas y depositados en remolques frigoríficos dados de baja de la circulación, sin registros de temperaturas que certificaran su sanidad.
"Al no quedar garantizada la trazabilidad sanitaria, detectada la caducidad y deficiente estado higiénico para el consumo, se inmovilizaron de manera cautelar todos los productos. Además de realizar denuncias por incumplimientos de la ley sanitaria, se ha investigado a dos hombres de 47 años, R.B.P. y M.G.G., como supuestos autores de los delitos contra la salud pública y falsedad documental", declaró la Guardia Civil.