Un informe, encargado por la propia fábrica, apunta a dos mechadoras como uno de los focos del brote de listeriosis. Son las agujas que se utilizan para rellenar la carne. Pero éste puede no ser el único elemento contaminado: tras el relleno, esta carne debe pasar por un proceso de horneado que en principio, acabaría con la bacteria.

"Parece ser que podría tener que ver con que la bacteria estuviese en la maquinaria en la cadena de producción", asegura el vicepresidente de la Junta de Andalucía Juan Marín.

Es el resultado preliminar de un informe encargado por la empresa donde se originó el brote, que no es el encargado por la Junta de Andalucía y dice que en dos de las maquinas hay bacteria. Son las que usan para mechar la carne, el proceso de infiltración de grasa que manualmente se hace de otra forma.

Pero la Junta de Andalucía será quien en sus informes verifique si se ha encontrado bacteria en esas máquinas y si la hay en alguna más. Eso explicaría que la Listeria haya resistido al calor del horno.

"Si la carne pasa por el horno, la bacteria muere. Hay que investigar otros focos", comenta Julio García Rodríguez, portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas.

Además, hemos sabido que otra empresa ha distribuida en Sevilla carne de La 'Mechá' pero con otro nombre. "Esta empresa lo que nos dice es que está vendiendo una marca blanca que hace 'La Mechá'. Esto implica que tenemos que volver a iniciar el procedimiento para buscar toda esa carne", asevera el subdirector general de Protección de la Salud de la Junta de Andalucía, Jesús Peinado.

Facua se ha querellado contra la empresa de la carne 'La Mechá' y la Asociación Defensor del Paciente ha presentado varias denuncias contra la empresa y contra la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla, a los que considera responsables por los problemas que hay podido haber con los controles sanitarios.