La Guardia Civil ha destapado el infierno en el que vivían ocho menores en una casa de Colmenar Viejo, en Madrid. Según la investigación, sus padres les pegaban con un cinturón y los tenían arrinconados en una habitación, prácticamente desnutridos.

Los progenitores, que fueron detenidos por maltratar a sus 8 hijos, han sido puestos en libertad con cargos, mientras los menores ya se encuentran en un centro de acogida.

Según publica El Mundo, la vivienda familiar presentaba un estado de insalubridad en todas las dependencias. Los menores vivían rodeados de basura, en unas condiciones pésimas. Sus padres les tenían recluidos en una habitación y presentaban signos de maltrato y malnutrición.

La portavoz de la Guardia Civil, Mercedes Martín, ha destacado que en la casa había "platos sucios, todo lleno de bolsas y todos los enseres por medio que impedían moverse con fluidez por la vivienda". Fuentes de la investigación aseguran además que los menores, cuando eran interrogados, estaban aleccionados para no hablar.

Los niños, de entre 4 y 14 años, faltaban a clase con frecuencia y sus ausencias eran justificadas por su padre, que ejerce como médico en un hospital de Madrid.

Según los agentes, la madre era víctima de violencia de género. Una violencia que luego volcaba en sus hijos. Ahora, los menores están en un centro de acogida de la Comunidad de Madrid. De momento, los padres están en libertad con cargos, pero tienen una orden de alejamiento.