De la decisión que este domingo tome la Plataforma para la Defensa del Transporte depende el futuro de muchas empresas agroalimentarias. Juan José Álvarez, director de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA), alerta de que "volver a un paro de transporte como el que ya hubo a finales de marzo supondría unas pérdidas muy grandes para el sector".

Los transportistas, que decidirán este domingo si paran los camiones a partir del 30 de junio, exigen una ley que garantice que no trabajen por debajo de los costes. Sin embargo, las propuestas planteadas en la última reunión de este viernes con el Ministerio de Transportes no convencieron a la plataforma.

Por su parte, Miguel Padilla, secretario general de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), advierte de que "en estos momentos, el sector agrario no podría soportar un nuevo paro del transporte de mercancías".

Preocupa especialmente el sector de la fruta, que se encuentra en época de recolección. Y es que podrían perderse 450.000 toneladas cada semana. En este sentido, Juan José Álvarez señala que "la fruta que es perecedera va del campo a la mesa en un periodo de 24 horas", por lo que, afirma, "las pérdidas serían considerables".

Además, buena parte de esta fruta tiene como destino los mercados internacionales. De esta forma, tal y como apunta Padilla, "no poder responder a la demanda supondría una pérdida de prestigio para el sector productor español, algo que puede redundar en la pérdida de destinos de exportación".

Además, esa fruta, verdura, carne y pescado, también llega a los restaurantes, por lo que el sector de la hostelería también se vería afectado: "Nos puede hacer un daño muy grave en un momento complicado, porque es verano, porque la distribución tiene que ser más rápida y porque trabajamos con productos precederos", manifiesta José Luis Yzuel, presidente de la Confederación Empresarial de Hostelería de España.

La hostelería avisa de que si no llegan los productos, se reduce la oferta y escalan los precios. Además, recuerdan que ellos también sufren la inflación. "Nosotros lo vivimos en nuestras carnes. Está subiendo todo y esto es una cadena de transmisión. Todo el mundo paga más por todo y automáticamente necesita recuperar", subraya Yzuel al respecto.

Así, piden a los transportistas que protesten sin perjudicar a otros sectores también castigados por el alza de los precios.