Catorce dotaciones de los bomberos y los soldados de la Unidad Militar de Emergencias (UME) continúan durante las horas nocturnas con las tareas de extinción del incendio forestal de Tárbena (Alicante), que ha quemado más de 600 hectáreas y ha causado el desalojo de 182 personas. Según Emergencias de la Generalitat Valenciana al término de la última reunión de coordinación en el puesto de mando avanzado (PMA), entre las catorce dotaciones hay bomberos del Consorcio Provincial de los parques de Dénia, Benissa, Benidorm y San Vicente del Raspeig, así como brigadas forestales y dos secciones de la UME.

El secretario autonómico de Seguridad y Emergencias, Javier Montero, ha manifestado que la evolución del incendio es favorable y ha elevado a 640 el número de hectáreas afectadas por las llamas. "Los efectivos van a trabajar (durante la noche) en el sur del flanco derecho para evitar que haya rebrotes, ya que hay aún mucho combustible sin quemar", ha advertido el secretario autonómico, en referencia a la biomasa seca que se acumula en esa zona.

Para Montero, si durante la noche se logra que no haya llamas de fuego activas, a primera hora de la mañana se podrá ser "positivo" en cuanto a la evolución de un fuego que aún no ha sido dado por estabilizado.

El incendio forestal ha obligado al desalojo de 182 personas en su mayor parte residentes extranjeros, 100 de ellos de viviendas diseminadas del término de Tárbena, 80 de Parcent y 2 de Xalò, mientras que los daños materiales está aún en proceso de evaluación.

Al mediodía de este lunes, un padre y su hijo han sido detenidos y, a continuación, puestos en libertad en relación con el origen de las llamas, según todos los indicios por una quema controlada de rastrojos agrícolas.

Este lunes, el alcalde de Tárbena, Francisco Javier Molines, ha explicado que las condiciones climatológicas han mejorado y las llamas han avanzado más despacio en las últimas horas, a lo que se ha unido el despliegue de cerca de una decena de medios aéreos, que se suman a las decenas de bomberos y brigadas forestales que operan en el terreno. De los desalojados, unos 100 en el término de Tárbena y 80 más en la vecina Parcent (casi todos extranjeros), ha señalado que no cree probable que puedan volver a sus casas este lunes, y ha añadido que la mayoría se encuentran reubicados en casas de amigos y familiares, ya que el albergue abierto en la casa de la cultura de la localidad, gestionado por Cruz Roja, únicamente ha estado ocupado "por dos personas".

A pesar de que "en el pueblo hay malas sensaciones y que la gente está con la cara descompuesta", según una vecina de Tárbena, se ha pedido precaución y que eviten acercarse a la zona del incendio para que los vehículos de extinción puedan desplazarse y desarrollar su labor.

Bomberos de la Diputación de Alicante, Bomberos Forestales de la Generalitat Valenciana, y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) del gobierno y la Región de Murcia siguen trabajando en la zona.

Las altas temperaturas no ayudan

"Como está todo tan seco y no llueve, ha ido subiendo todo hasta unos 100 metros de mi casa", ha señalado un vecino, y otro ha explicado que el fuego se ha extendido "muy rápido, en 20 minutos".

Allí hay desplegados seis medios aéreos, dos hidroaviones, siete unidades forestales, 10 dotaciones de bomberos y la Unidad Militar de Emergencias (UME). La Región de Murcia, a petición de la Generalitat Valenciana, ha enviado un helicóptero y una brigada con seis miembros para ayudar a la extinción del incendio forestal.

"Se ha declarado el nivel dos del plan especial de riesgos de incendios forestales por las altas temperaturas que se han dado a partir de la mitad de la mañana", ha indicado Elisa Núñez, consellera de Justicia e Interior de la Comunidad Valenciana.

Elisa Núñez ha sostenido que, aunque durante la noche las condiciones meteorológicas serán "favorables", "hay que ser cautelosos y esperar". De esta forma, ha pedido en este sentido, a los vecinos que "intenten no desplazarse a ver el incendio", puesto que la carretera es "un poco estrecha" y "es necesario que los vehículos que están trabajando durante toda la noche y que van a continuar trabajando puedan desplazarse y desarrollar su labor con la mayor seguridad y tranquilidad posible".

El fuego ha comenzado en la Sierra Ferrer, los accesos por carretera están cortados y todavía se investiga el origen del incendio, aunque tanto el Ayuntamiento de la localidad como la delegada de gobierno de la Comunidad Valenciana barajan "una quema agrícola descontrolada" pero aún "hay que ver las circunstancias de la quema".

Es una zona con una orografía muy compleja con gran masa forestal y el alcalde Molines ha comentado que es por eso que "solo son los medios aéreos los que pueden llegar" en estas zonas forestales, a lo que se suma que la humedad es inferior al 30%, las temperaturas superan los 30 grados y el viento no baja de los 30 km/h. Los técnicos se muestran optimistas y creen que hoy lo tendrán todo bajo control.