Un juez marroquí del Tribunal de Apelación de Beni Melal, en el centro de Marruecos, ha formulado los cargos más graves del Código Penal marroquí contra once de los presuntos autores del secuestro durante dos meses, torturas y violación colectiva de la menor de edad Jadiya Qarru.

Los once agresores de Jadiya están acusados de "formación de banda criminal", "secuestro y retención de una menor", "violación bajo amenaza de arma blanca con resultado de pérdida de virginidad", "tortura mediante quemaduras y tatuajes" y "trata", entre los cargos más graves y que acarrean algunas de las penas más altas de la legislación.

El juez de instrucción Mohamed Faher ha aplazado acto seguido la audiencia de la propia Jadiya, de 17 años, hasta el próximo 10 de octubre, para poder tener en sus manos el examen médico forense que le fue practicado en Casablanca a petición suya.

Allí, un médico forense ordenó que se le practicaran exámenes ginecológicos, psicológicos y dermatológicos (pues la menor fue además cubierta de tatuajes durante su secuestro, que duró dos meses). La vista preliminar se desarrolló en medio de una gran tensión, con la sala llena de familiares de los once acusados, que clamaban a gritos injusticia y aseguraban que todos los cargos son falsos e inventados por la muchacha.