Imprudencia de un grupo de surfistas en el puerto de Zarautz, Gipuzkoa. Una ola de siete metros de altura rompe contra el malecón y envuelve a un joven que tiene suerte de no ser arrastrado. Sus amigos le animan a saltar en medio del fuerte oleaje, viene una segunda pared de agua y se lanza al mar embravecido.

Así, los tres chicos desafían al fuerte oleaje en plena alerta naranja por temporal. Hasta se hacen un selfie para inmortalizar su temeridad.

Sin piedad, el oleaje les arrastra mar adentro y se golpean contra el malecón. Al final es necesario lanzarle una tabla para que pueda salir. Los vecinos de la zona no entienden que cometan este tipo de imprudencias. "¡Qué falta de cabeza! Se puede dar contra la pared y pegarse una buena leche!", afirma un hombre ante las cámaras de laSexta. "Están jugando con la vida. El mar es muy peligroso cuando está así", añade otra mujer.

Durante el temporal todos los paseos marítimos del Cantábrico han estado cerrados por la alerta de fuerte oleaje.