Tras seis días luchando contra el fuego, llegan noticias más optimistas desde el incendio de Villanueva de Viver (Castellón). La meteorología, con temperaturas bajas y humedad relativa alta, ha dado una tregua y ha abierto una "ventana de oportunidad" para estabilizar las llamas.
El Puesto de Mando Avanzado (PMA) ha informado de que han volado drones de la UME y se han detectado muy pocos puntos calientes en el perímetro. Durante toda la jornada del miércoles han seguido trabajando 230 medios aéreos y 500 terrestres para resfrescar el terreno.
La evolución a lo largo de la jornada ha sido "positiva" y los bomberos han podido "consolidar y asegurar diversas zonas", según han informado desde el Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón. Aún así, han subrayado que "no se baja la guardia" ante las próximas previsiones meteorológicas, en las que el viento y las temperaturas altas "siguen estando presentes".
El perímetro del incendio se mantiene en 55 kilómetros y las hectáreas afectadas, en 4.700. Todavía hay cerca de 1.400 personas evacuadas, después de permitir que 200 vuelvan a casa.
A partir del jueves, los cambios de régimen de viento, con rachas de más de 70 km/h y una humedad inferior al 20%, podrían producir "rebrotes con efecto chimenea que pueden alcanzar propagaciones rápidas" y grandes columnas de humo que alcanzarían alturas "muy elevadas", según han informado desde Emergencias.
Estos son los municipios que siguen desalojados: Fuente de la Reina, Puebla de Arenoso, La Monzona, Montanejos, Montán y Arañuel y Torralba, además de las pedanías de Los Calpes, La Alquería de Montanejos y La Artejuela.

Ordena retirar las bombas
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Los detalles La orden judicial refuerza el precinto que ya hizo por vía administrativa la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Los pozos pudieron ser descubiertos gracias a la denuncia de ocho trabajadores. Otro informe de la Guardia Civil cifró en más de seis millones de euros el daño ambiental.