El hallazgo de los tres cadáveres, todos de nacionalidad polaca, se produjo durante la tarde del jueves 31 después de que la madre de la mujer, que reside en una urbanización de la costa de Orihuela, diera la voz de alarma porque no veía a la familia desde el pasado día 24.

Las mismas fuentes han señalado que los indicios apuntan a que el crimen pudo haberse cometido hace una semana.