David Dauzat es el asesino que ha confesado haber matado a su mujer Natasha Dauzar, de 24 años, tras apuñalarla docenas de veces en Texas. El acusado apuñaló a la mujer, la decapitó y guardó su cabeza en el congelador ante los ojos de sus hijos, de uno y dos años de edad. La pareja acababa de celebrar su segundo aniversario.

Después del asesinato, el chico de 24 años se puso en contacto con su hermano para contarle lo ocurrido. Este no dudó en llamar a las autoridades, quienes se personificaron en el lugar del crimen. El asesino les recibió en su casa con sangre en la ropa y los niños estaban horrorizados pero sanos al lado del cuerpo de la madre.

El acusado ha sido condenado a 52 años de prisión, teniendo que cumplir al menos 26 antes de conseguir la libertad condicional.

Según informa 'The Sun', el inculpado afirmó haber fumado marihuana antes de ejecutar el crimen. "Es una tragedia para todos los involucrados en la situación y creo que resalta los peligros de consumir drogas en la sociedad. Mi cliente ha asumido la responsabilidad de sus acciones", asegura su abogado.