A las nueve de la mañana empezaba la inspección ocular de la Guardia Civil del piso, perteneciente a la abuela, en el que este jueves encontraron a un niño de tan solo cuatro años asfixiado en el interior de una lavadora , en Magaluf, Mallorca. Los agentes intentan determinar cómo acabó el pequeño en su interior y con la puerta cerrada.

Hasta ahora, los indicios son claros: todo apunta, según los agentes, a un accidente fatal y a una muerte por asfixia, aunque todavía está pendiente la autopsia.

El pequeño se quedó este jueves a cargo de su abuela en su domicilio porque no había colegio. La mujer tuvo que ausentarse y le dejó en su casa al cuidado de la tía del niño, de tan solo 17 años. La joven se echó la siesta y cuando la abuela regresó buscaron al niño, a quien encontraron dentro de la lavadora.

Según la Guardia Civil, el niño estaba en parada respiratoria cuando lo encontraron. Sin embargo, cuando llegaron los servicios emergencias fue imposible reanimarlo.

Los vecinos están conmocionados por el suceso: "Escuché cómo el padre lloraba y en poco tiempo llegaron las ambulancias". Por el momento, la Guardia Civil ha tomado ya declaración a la abuela y a los padres. Próximamente lo harán con la tía del pequeño. Según hemos podido saber, se ha puesto a disposición de la familia psicólogos para intentar ayudarles a superar el shock en el que están inmersos.