El cuerpo sin vida del niño de 13 años que desapareció el pasado sábado en el río Ebro, a su paso por Zaragoza, ha sido encontrado este miércoles en la margen derecha, en el entorno del camino de la Alfranca, pasada la Z40 y la desembocadura del río Gállego.

El cadáver ha sido localizado por los miembros de la Unidad de Apoyo Operativo (UAPO) de Policía Local de Zaragoza, que formaban parte del dispositivo municipal, y que batían la zona a pie desde primera hora de esta mañana, han confirmado fuentes municipales.

La familia del pequeño ha recibido atención psicológica por parte de los servicios sociales municipales. Por su parte, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, y el concejal delegado de Bomberos, Alfonso Mendoza, han transmitido su pésame a la familia en nombre de la ciudad y han puesto a su disposición todo lo que puedan necesitar en estos duros momentos.

El niño fue visto por última vez el pasado 8 de mayo dentro del agua del río, a la altura del embarcadero de la Expo, en Ranillas. El testigo fue un pescador, después de que el menor desapareciera tras haber acudido a bañarse con sus amigos. Tras recibir el aviso del 112, a las 18.45 horas de esa tarde, la Unidad de buceo del Cuerpo de bomberos del Ayuntamiento se trasladó al lugar para rastrear el río, junto a la ambulancia del 080, hasta que hoy se ha confirmado el fallecimiento.