El hombre de 43 años acusado del asesinato de su mujer, su suegra y otro hombre en Valladolid ha sido encontrado ahorcado en su celda de la cárcel de Villanubla, donde se encontraba desde el martes, según avanza la agencia Efe, que cita fuentes próximas al caso.

De acuerdo con las mismas, el presunto asesino se habría ahorcado con una sábana. El hombre, que había salido hace poco de la misma prisión, donde había cumplido condena por otros delitos, se encontraba ahora en periodo de observación y solo en una celda del mencionado centro penitenciario.

Por otra parte, fuentes penitenciarias han confirmado a Efe que en la tarde del miércoles se produjo la muerte de un recluso en la cárcel de Valladolid, aunque no facilitaron su identidad. Según estas, se ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias de la misma, sobre la que ya se ha informado a la autoridad judicial.

Triple crimen en Valladolid

El pasado sábado por la tarde, una mujer de 78 años y su hija, de 54, eran encontradas muertas, una de ellas con heridas de arma blanca, tras un incendio originado en su vivienda de Valladolid, mientras que un hombre de 72 años también aparecía muerto por arma blanca en otro incendio declarado en una vivienda próxima.

El acusado, marido de la mujer de 54 años y que fue detenido el mismo sábado, negó la autoría de los hechos durante su declaración del martes ante el juez. Sin embargo, este decretó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza. Por su parte, el forense tomó muestras del ADN del arrestado, que fue trasladado a la Prisión Provincial de Valladolid. Se le imputaban delitos contra la vida (homicidio o asesinato), incendio, daños, contra la salud pública, robo con violencia y lesiones.

Su mujer le había denunciado por violencia machista, según confirmaba la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, pero no tenía una orden de protección. El hombre asesinado, por su parte, conocía al detenido, aunque por el momento se desconoce cuál era exactamente la relación entre ellos, si bien algunas fuentes apuntan a una cuestión de drogas, de acuerdo con Efe.

El sábado, una llamada alertando de un incendio en el barrio de La Rondilla llevó a Policía y bomberos al lugar del suceso, donde, una vez extinguido el fuego, fue hallado en el interior del domicilio el cadáver calcinado de un hombre, que presentaba signos de muerte violenta, en concreto de apuñalamiento.

Minutos después, una mujer llamó a emergencias indicando que no sabía lo que le pasaba a su hija, que se encontraba en una casa donde también se declaró un incendio. Tras apagar el incendio, los agentes encontraron en el interior los cadáveres calcinados de dos mujeres, uno de ellos con heridas de arma blanca.

La Policía detenía esa noche, muy cerca del lugar donde produjeron ambos sucesos, al acusado porque supuestamente agredió a dos matrimonios de avanzada edad con la intención de entrar en sus casas. Una de las parejas tuvo que ser trasladada al hospital por las lesiones que sufrieron, y según la investigación de la Policía Nacional, la intención del agresor era introducirse en sus domicilios, algo que no consiguió.