Las imágenes grabadas por una extrabajadora de la residencia de Llíria, en las que se ve a ancianos atados, desnutridos o tirados en el suelo, han causado conmoción entre los ciudadanos.

En laSexta hemos hablado con María, la trabajadora que llevó estos vídeos ante la Fiscalía. Asegura que lo hizo porque esas “injusticias” le dolían “muchísimo”, algo que le llevó a querer llevarlas ante las autoridades.

Desde la empresa Domus, sus trabajadores lo niegan, afirmando que las imágenes están sacadas de contexto. “No se corresponden con la realidad. Ninguno de nosotros hemos desatendido a los residentes o hemos actuado de forma poco diligente. Nos duele que nuestro trabajo se esté manchando por imágenes como estas”, afirman.

Añaden desde la dirección que ya se ha abierto una investigación interna en la que depurarán “todas las responsabilidades” si ha habido algún comportamiento no adecuado. Hasta que eso pase, los familiares se manifiestan delante del centro.

En total son 151 plazas las que dispone el centro, 35 son concertadas. En los últimos cuatro meses han recibido cuatro inspecciones por el material precario que utilizan según los denunciantes o desatención. La Fiscalía provincial ya ha abierto diligencias de investigación y los familiares siguen buscando una solución para sus mayores.