El derrumbe de un edificio de tres plantas en una zona de segundas residencias en Peñíscola, Castellón, ha dejado a varias personas atrapadas en su interior. Por el momento, Emergencias de la Comunidad Valenciana ha informado de que hay al menos tres personas atrapadas bajo los escombros, una de ellas viva y consciente.

Tomás Alonso, que regenta un restaurante en la zona, ha explicado a laSexta cómo se ha vivido la situación, que él mismo describe con la voz algo temblorosa como "muy triste y muy dolorosa". Tal y como ha contado en una conversación telefónica con este medio, se encontraba trabajando en el negocio cuando les han avisado de que un edificio se estaba viniendo abajo. Rápidamente, tanto él como sus compañeros se han acercado al edificio para ver si podían ayudar.

"No me lo podía creer. Hemos salido corriendo pensando que podía hacer falta ayuda y cuando hemos llegado el edificio todavía estaba acabándose de derrumbar con gente dentro", ha relatado a este medio. Concretamente, él ha visto a una persona entre los escombros.

Así ha relatado el duro momento: "Había una persona con una mano fuera, hemos intentando sacarlo pero los agentes de seguridad me han quitado de encima y nos han dicho que nos apartáramos para esperar a los bomberos".

Sobre si puede haber más personas en el edificio, el testigo ha reconocido que sigue siendo agosto y son apartamentos turísticos: "Tiene que haber alguien más", considera. "La Policía nos ha ordenado silencio para poder escuchar si había alguien, pero no se ha escuchado a nadie todavía".

Además, ha confirmado que no se ha escuchado ninguna explosión y que no olía ni a quemado ni a gas en la zona.