La Guardia Civil ha encontrado en Almería a un perro con graves signos de violencia y es que el animal tenía un alambre atravesado en la boca y atadas sus patas: "Le habían atravesado la boca con un alambre para que no pudiese alimentarse, y sus patas, para que no pudiera andar".

La Guardia Civil buscó inmediatamente una clínica veterinaria donde pudieran atender al animal que se encontraba en estado crítico.

Al llegar al veterinario lo bañaron inmediatamente, ya que el animal tenía una sustancia por todo el cuerpo que podría ser gasolina.

El can continúa ingresado a la espera de realizarle más pruebas que evalúen su estado de salud.