El principal objetivo es captar la agresión, también vienen contratiempos... Algunos ríen, pero lo que viene a continuación no es nada divertido.

Los agresores dicen que lo hacen por vacilar y que no piensan en las consecuencias que pueden tener las grabaciones. "Hay un chico al que le pegan porque le estaban enseñando a pegarse y al final se descontroló", cuenta un testigo.

Dicen que estos vídeos son bastante habituales, e incluso pruebas de valentía. "Se golpean para probar a pegarse y se acaban picando unos entre otros y se descontrolan", asegura una joven.

Cuando alguien empieza a pelearse, la gente se echar para atrás y lo graba. En parques se llevan a cabo peleas entre menores que después graban con sus móviles.

Desde el Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz y los institutos implantan medidas para atajar el problema. Una víctima lo denunció ante la Policía Nacional, que está investigando el resto de vídeos.

El Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz, en Madrid, podría tomar sanciones contra todos los agresores.