El Parque Nacional de Monfragüe, la Sierra de la Culebra o la de Do Courel son algunos de los espacios protegidos que se han visto gravemente afectados por los incendios que sufre España. Roberto Castro, presidente del geoparque Do Courel, señala que "con 11.000 hectáreas calcinadas, uno se puede imaginar cuánto se ha perdido".
Un equipo de laSexta ha acompañado a Roberto por el geoparque, que alberga uno de los espacios naturales más importantes de Galicia. Castro afirma que "es muy difícil hacer hacer un cálculo de los daños, pero son cuantiosos", a lo que añade: "Hay cuantiosas pérdidas económicas en la hostelería, en el sector del turismo rural...".
Al igual que el geoparque de Do Courel, hay otros espacios protegidos que sufren las desastrosas consecuencias de las llamas. "La existencia de incendios forestales en esos territorios pone en riesgo valores de mas alto nivel", destaca Antonio López Santalla, portavoz del Organismo Autónomo Parques Naturales.
En la misma línea, Lourdes Hernández, responsable de incendios de WWF, subraya que se trata de "lugares que tienen la joya de la corona en cuanto a especies de fauna y constituyen importantísimos reservorios de biodiversidad".
Además, los efectos de los incendios impactan más allá del lugar exacto donde las llamas lo devoran todo. Y es que "las cenizas que quedan en el suelo son arrastradas lejos de esos lugares con las primeras lluvias, pudiendo alterar el abastecimiento de agua", tal y como advierte López Santalla.
Hace falta tiempo para saber el alcance de los daños, pero las decisiones que se tomen serán clave en el futuro: "De lo que hagamos ahora depende los incendios que vamos a tener a futuro; toca ver exactamente cuáles son las afecciones que ha tenido el espacio protegido y plantear acciones para tratar de recuperar la biodiversidad", defiende Lourdes Hernández. La prioridad es garantizar la protección del Medio Ambiente en una realidad donde la crisis climática, dicen, ha llegado para quedarse.