Todo, a raíz de que ella permaneciera casi un mes en paradero desconocido incumpliendo las resoluciones judiciales que obligaban a que regresaran con el padre.
Este asunto ha sido objeto de una vista en el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada, a la que Juana Rivas ha llegado "con fuerza" y confiando "en que todo va a salir bien", según ha señalado en declaraciones a los periodistas en las que ha reconocido que todo este proceso "está siendo lento, doloroso y muy duro".
Unas horas después de que el Juzgado de Instrucción 2 de Granada haya decretado la apertura de juicio oral contra ella por la supuesta sustracción de sus dos hijos, por lo que se enfrenta a una petición fiscal de cinco años de cárcel, Juana Rivas ha sostenido que es "imposible" saber si, a día de hoy, volvería a actuar igual.
Rivas ha incidido en que ella "era una víctima que escapó" del domicilio familiar de Carloforte (Italia) porque era la única alternativa que veía frente a la supuesta situación de violencia de género que siempre ha alegado que padeció.