La desgarradora imagen dio la vuelta al mundo: una niña consolaba a su hermanito mientras este vomitaba como consecuencia de la quimioterapia. El protagonista de la ya famosa instantánea era Beckett, un niño de Texas (EEUU) que entonces solo tenía cuatro años y estaba en pleno tratamiento contra la leucemia.

La fotografía la compartió la madre de ambos, Kaitlin Burge, en septiembre de 2019, relatando cómo su hija Aubrey, tan solo 15 meses mayor que su hermano, cuidaba y se preocupaba por él mientras lidiaba con los efectos secundarios de la quimio. Ahora, dos años después, Kaitlin ha hecho pública la mejor de las noticias: Beckett ha terminado su tratamiento y está recuperado.

En un vídeo compartido por su madre en Facebook, el pequeño, que fue diagnosticado con leucemia linfoblástica aguda en 2018, aparece tocando la campana en el hospital para simbolizar el final de su tratamiento:

"Venciste al cáncer, cariño. Tres años y medio de quimioterapia, cada día. Aprender a volver a caminar dos veces. Dos veces campeón de la caída del cabello. Lo hiciste", escribió Kaitlin, que añadió que el próximo 15 de octubre le retirarán a Beckett el reservorio a través del cual recibía su medicación.

En declaraciones recogidas por el 'Daily Mail', Kaitlin ha explicado que, pese a la recuperación de Beckett, Aubrey sigue siendo protectora hacia su hermano y que ambos han formado un "vínculo irremplazable" por la enfermedad del niño: "Aubrey ha tenido un enorme impacto en ayudarle a superar esto", ha agregado.

Kaitlin, que revela que Beckett ya sabe leer, incluso celebra la vuelta de las ocasionales peleas entre ambos hermanos, una señal de que la vida familiar vuelve al fin a la normalidad. "Pueden jugar como hermanos normales ahora. Yo les acompaño al colegio por la mañana, pero vuelven a casa juntos en bicicleta", revela.