La fatalidad quiso que la bala que el policía de Andújar (Jaén) disparó contra el hombre que el domingo agredió a dos agentes, armado de un cuchillo y un martillo acabó impactando en el abdomen del otro policía, causándole la muerte.

Según ha podido saber laSexta, esa bala impactó antes en el agresor y luego acabó en el abdomen del policía nacional. No obstante, la Policía Científica y los forenses no saben aún con precisión la trayectoria del proyectil que mató al agente. Las conclusiones de lo ocurrido es que el atacante recibió tres disparos y murió por uno en el pecho, uno en el glúteo y otro en una pierna.

Sobre la hipótesis de que una moneda en el bolsillo del agresor desvíe la bala, expertos en la materia aseguran que un proyectil -ya sea blindado o semiblindado- disparado a "tan corta distancia es difícil que se desvíe porque tope con una moneda".

El agresor portaba un martillo

El suceso tuvo lugar en la mañana del domingo en la calle Las Monjas de la localidad jienense cuando un hombre se dirigió hacia una edificio de viviendas golpeando reiteradamente la puerta y gritando que le abrieran. Además, portaba un martillo y un cuchillo y su intención era atacar a un guardia civil que vive en ese bloque. Ante ello, los vecinos llamaron al 112 y hasta el lugar se trasladó una patrulla de la Policía Nacional, mientras algunos vecinos grababan la secuencia de los hechos.

Los vídeos muestran la llegada del coche policial y como uno de los agentes -el copiloto- sale del vehículo. El agresor se dirige hacia él y este, al ir corriendo hacia atrás, se tropieza y cae al suelo mientras empuña en su mano derecha la defensa extensible y en la izquierda el arma reglamentaria que previamente había montado.

Es entonces cuando este agente dispara el arma y la bala alcanza el bolsillo del agresor, donde llevaba unas monedas, la bala rebota en una de ellas, se desvía y alcanza al otro policía, según han relatado a EFE fuentes de la investigación, que han precisado que la moneda quedó deformada. Sin embargo, se trata de una hipótesis y no está claro todavía que haya sido así.

Buscaba venganza

Las fuentes han señalado también que al agresor se le condena en su día por malos tratos y estuvo en la cárcel tras incumplir una orden de alejamiento. Al parecer, un allegado del guardia civil al que quería agredir le había prometido algún favor a cambio de dinero, pero no se lo hizo a pesar de que le pagó la cantidad que acordaron, ha añadido las fuentes consultadas. Por ello, el agresor decidió vengarse.

Las fuentes también han precisado que el hombre abatido disponía de dinero, ganado en Bolsa, y han recalcado que en el registro de su vivienda se ha encontrado una cantidad importante de efectivo.