La Guardia Civil sigue inspeccionando el piso de la mujer detenida tras el hallazgo de un cráneo en una caja en una vivienda de Castro Urdiales, que podría corresponder a su pareja, así como otras zonas del municipio donde este hombre tendría algunos terrenos. Estos registros se podrían llevar a cabo también en unos terrenos del Sámano de su propiedad, cerca de los cuales vive un primo del desaparecido, Jesús B., y su mujer.

El primo habló para Atresmedia, explicando que recibió un mensaje tras la desaparición y desconfió. Además, la pareja de este hombre, ahora detenida tras el hallazgo de la cabeza, facilitó un móvil nuevo a la familia de su novio, asegurando que este había cambiado de teléfono. Puedes ver sus declaraciones en el siguiente vídeo.

Esta última, Begoña Arias, ha señalado, que Jesús, de 67 años, era "un pedazo de pan" y que la detenida, Carmen M., "ha hecho con él lo que le ha dado la gana".

Según ha contado, fue su marido quien puso la denuncia por la desaparición de su primo, después de que pasara el tiempo sin que éste contestara a su mensajes de 'whatsapp'. "Estábamos preocupados porque nunca se marchaba de viaje sin decírnoslo" y "tampoco su hermano sabía nada, sólo por ella y él nos lo decía a nosotros".

Finalmente, y ante la falta de noticias y de informaciones que nunca llegaban a confirmarse, como que su primo se había ido a Galicia o a San Sebastián, el pasado mes de abril denunciaron su desaparición.

"Sospechamos que ella sabía más de lo que decía", ha relatado Begoña, quien ha reconocido que ella y su marido tenían "muy poco" trato" con la detenida. "Venía algún día por aquí", pero poco más.

Ahora, y cuando se está investigando que el cráneo encontrado por una amiga de la detenida dentro de una caja corresponde a Jesús B., reconoce que lo que ha ocurrido es "fortísimo". "Pensábamos que no iba a volver, pero no así, no de esa forma", ha lamentado.

"Desde el minuto uno sabíamos que no se había ido a meditar, nosotros y más gente de los que le conocíamos de toda la vida", ha señalado Begoña, que lo que espera ahora es que "se resuelva" el caso y que "aparezca el cuerpo" del desaparecido.