La familia de Fernando, el menor madrileño encontrado muerto en un vertedero de Toledo, y su primo Ángel, que todavía sigue desaparecido, no cree en la hipótesis con la que trabaja la Policía. La principal línea de investigación es que los dos primos viajaron a Toledo por voluntad propia.

Tras sopesar pasar la noche en la estación,se habrían marchado del lugar y habrían decidido resguardarse de la lluvia y el frío de la noche en un contenedor. Allí se habrían quedado dormidos y habrían sido recogidos por el camión de la basura que los transportó hasta el Ecoparque.

"Son hipótesis que da la Policía, pero para nosotros, para los familiares eso es incierto. Si un niño se mete y se refugia del frío en un contenedor, deberían estar los dos. Si ha aparecido un cuerpo, deberían aparecer los dos", ha defendido el portavoz de la familia, Antonio Fernández.

Lo cierto es que la Policía ya ha pedido una autorización judicial para buscar en el vertedero también a Ángel. Creen que si hay alguna pista del pequeño, será también allí, por lo que la búsqueda en el Ecoparque comenzará este mismo viernes.

Otro de los portavoces de la familia, Juan José Cortés, ha anunciado que quieren "descartar rotundamente que se trate de un ajuste de cuentas". La familia, reticente a la hipótesis de los agentes, en un primer momento incluso han sopesado pedir una segunda autopsia, pero esta idea ha sido finalmente rechazada porque lo que quieren los padres es poder enterrar a su pequeño cuanto antes.

Mientras tanto, este jueves, los padres de Fernando han viajado hasta Toledo para confirmar lo peor: que el cuerpo es el de su hijo de 17 años. Fernando desapareció junto a su primo Ángel (de 11 años) en Madrid y 11 días después se encontró su cuerpo sin vida entre los restos de basura del Ecoparque.

Están devastadosy acompañados en todo momento de sus familiares, amigos y vecinos, que se han congregado a las puertas de su vivienda para mostrar su apoyo.